📍 Calle Esmeralda, 2 E, 04230, Almería 

  +34 614 17 61 19 

info@holaingenieria.es 

Con el paso de los años y a medida que la tecnología ha ido avanzando, nuestras formas de autoconsumo energético también han evolucionado. Y es que cada vez más las personas se las han ingeniado para encontrar soluciones más sostenibles y económicas que les permitan cubrir sus necesidades energéticas.

En este sentido, el autoconsumo colectivo se ha presentado como una de las maneras más innovadoras de los últimos tiempos, sobre todo porque a través de él, las comunidades pueden generar, administrar y distribuir energía renovable de forma conjunta; mientras obtienen un sinfín de beneficios económicos y medioambientales.

Pero, ¿qué es exactamente el autoconsumo colectivo?, ¿cómo funciona? Si deseas conocer más acerca este tema, te invitamos a que continúes leyendo.

¿Qué es el autoconsumo colectivo?

Como su propio nombre lo indica, el autoconsumo colectivo hace referencia a la producción de energía que se genera a través de una misma instalación fotovoltaica, y que es consumida por un grupo de usuarios de forma compartida, los cuales tienden a estar ubicados dentro de una misma zona o comunidad.

Los motivos por los que normalmente los usuarios optan por agruparse para compartir y gestionar recursos energéticos, es porque les permite disminuir costos y reducir considerablemente el impacto ambiental.

Entonces, para que quede claro… el autoconsumo colectivo, es todo el consumo de energía que se hace de forma compartida por un grupo de personas.

Bases del autoconsumo colectivo

Debido a que el autoconsumo se ejecuta a través de la instalación y gestión de un mismo sistema de producción de energía renovable, que pueden ser placas solares o turbinas eólicas; quienes conformen una comunidad y deseen optar por el autoconsumo colectivo, deberán colaborar entre todos durante el proceso de financiación, instalación y administración del sistema.

El principio fundamental y por el que se rige el proyecto es que toda la energía eléctrica generada, tendrá que ser distribuida entre los miembros de la comunidad, de acuerdo a determinados criterios que hayan sido establecidos anteriormente y que resultan más beneficiosos para cada usuario. Estos se le comunican a la distribuidora y tendrán vigencia hasta que se ejecute una nueva notificación.

Beneficios del autoconsumo colectivo

Sin duda, optar por esta modalidad de consumo energético brinda grandes ventajas y permite que varias personas se vean beneficiadas. Entre las principales y más importantes, encontramos:

  • Mayor accesibilidad para los usuarios y reducción de costos. Al ser un proyecto colectivo, su precio será mucho más asequible a la hora de dividirlo entre varias personas, lo que resulta mucho mejor que hacer una instalación individual. Asimismo, no solo se trata de compartir la inversión inicial, sino que también los gastos de mantenimiento se asumen entre varios, lo que a la larga significa un ahorro grande.
  • Instalaciones más grandes y eficientes. Como se trata de un proyecto en conjunto, se multiplican las opciones, lo cual hace que las posibilidades de encontrar la superficie ideal sea mucho más probable que cuando se trata de un solo propietario. Al igual que una instalación colectiva será mucho más eficiente que la suma de varias instalaciones individuales.
  • Sostenibilidad y cuidando del planeta. El uso de energías renovables en términos de contribuir al medioambiente es inmenso, ya que reduce considerablemente a la dependencia y utilización de los combustibles fósiles. 
  • Ahorro común de energía y más autonomía. Los usuarios tendrán mucho más control sobre su consumo y producción de energía eléctrica.
  • Aumenta el valor para los inmuebles conectados. Sin duda una instalación fotovoltaica para una comunidad revaloriza el precio de los inmuebles que formen parte de ella.
  • Acceso a ayudas y subvenciones para instalaciones. Desde el 2022 y hasta el 31 de diciembre de 2023 los usuarios tienen la posibilidad de solicitar ayudas provenientes de la Comunidad Europea para la instalación de paneles solares que contribuyan al autoconsumo. Estas ayudas se tramitan generalmente a nivel de municipio y comunidad, y son totalmente válidas para el sector industrial o empresarial y para el residencial.

¿Cómo es el proceso de una instalación de autoconsumo colectivo?

Llevar a cabo un proyecto como este, en el que participa un gran número de personas, toma tiempo. Aunque, con una buena organización y cumpliendo con cada uno de los requisitos se reduce considerablemente el tiempo de espera. Por lo general, el proceso de implementación es el siguiente:

  • Planificación y acuerdo. Al ser un proyecto colectivo, lo primero a hacer es que todos los involucrados lleguen a acuerdos básicos como el tipo de instalación que desean, el monto que están dispuestos a pagar, normas de uso y cómo se distribuirá la energía eléctrica generada.
  • Ejecución de trámites. Como cualquier otro proyecto, es fundamental gestionar ciertos permisos y solicitudes antes de comenzar con la instalación, es decir, se deben cumplir con todos los trámites legales y burocráticos requeridos. Los cuales suelen variar según el país. Sin embargo, en el caso de España, por lo general lo que se necesitan son permisos de construcción, acuerdos con la distribuidora local y certificaciones de las instalaciones energéticas.
  • Instalación del sistema. Una vez se cuente con todo el papeleo requerido, se comenzará con la instalación de los equipos necesarios. Los cuáles serán aquellos que el grupo de consumidores hayan escogidos como su sistema de generación de energía renovable.
  • Producción y distribución de energía. La comunidad empieza a disfrutar de la energía generada, la cual a su vez está siendo distribuida según el acuerdo que anteriormente se haya establecido.
  • Monitoreo. Todos y cada uno de los participantes tendrán acceso a contadores bidireccionales, con los cuales se puede calcular la energía generada y determinar la compensación económica que le pertenece a cada uno.

Tipos de autoconsumo colectivo

Existen varios tipos, a continuación, te presentamos cada uno de ellos:

  • Autoconsumo colectivo sin excedentes. Este modelo utiliza dispositivo antivertido, lo que significa que toda la energía producida es consumida en su totalidad, ya que se evita la inyección de energía sobrante a la red eléctrica.
  • Autoconsumo colectivo con compensación simplificada. Este sistema brinda la posibilidad de obtener una compensación o descuento en la factura al final de cada periodo de facturación, si se produce más energía de la que se consume. Esto se debe a que la energía adicional es inyectada a la eléctrica.
  • Autoconsumo colectivo con excedentes no acogidos a compensación. Este modelo hace que los excedentes de energía se vierten a la red y los propietarios obtienen una remuneración directa por la energía que ha sido proporcionada. Pero para comercializar esta energía se debe llegar a un acuerdo con las empresas comercializadoras.

Conclusión

El autoconsumo colectivo es mucho más que una simple moda, se trata de una modalidad sostenible y económica que permite enfrentar todos aquellos desafíos energéticos actuales. Esta alternativa no solo contribuye al uso inteligente de energías limpias y renovables, sino que también promueve la cooperación y colaboración entre personas que habitan en una misma comunidad. Es por ello que el autoconsumo colectivo se traduce en un ahorro económico para las personas y una manera más respetuosa de cuidar el medio ambiente.

Abrir chat
Funciona gracias a Green Concept
Hola
¿En qué podemos ayudarte?